Nery Ajsivinac, una vida sobre ruedas y metas cruzadas

Han transcurrido 62 años desde aquel día en que se dio el banderazo de salida de la primera edición de la Vuelta Ciclística a Guatemala.

Han transcurrido 62 años desde aquel día en que se dio el banderazo de salida de la primera edición de la Vuelta Ciclística a Guatemala. Este evento, con el paso de los años, se convirtió en la competencia que fusiona la pasión por el deporte y el espíritu triunfador guatemalteco.

La Vuelta, como se le conoce popularmente, ha tejido una historia de logros extraordinarios y ha visto nacer a personajes sobresalientes, tal como Nery Ajsivinac, un destacado periodista deportivo con una larga trayectoria en el mundo del pedal. Conoce más sobre su vida.

Un camino de kilómetros y crónicas

A sus cinco años, mientras acompañaba a su papá y a su mamá a ver al pelotón de la Vuelta Ciclística a Guatemala de 1989 circulando en El Camán, Patzicía, Nery tuvo una revelación que le cambiaría la vida: vio al líder, su pedaleo y determinación, reconoció el esfuerzo del resto de pedalistas y se impactó con la felicidad que todos compartían en ese momento.

Esa emoción invadió al pequeño Nery para jamás abandonarlo. 

“Recuerdo que animé al ciclista Leonardo Obispo en el año 89 durante la Vuelta”

A partir de esa experiencia, su interés creció y cada año aprendía más sobre los ciclistas y el deporte, hasta que en 1999, comenzó a narrar a detalle lo que estaba presenciando en la Vuelta. En ese momento nació el periodista deportivo que ahora brilla en la Federación Guatemalteca de Ciclismo.

“Comenzar a transmitir la emoción del ciclismo, hizo que me diera cuenta que era mi pasión”

El inicio del pedaleo periodístico

Los inicios profesionales de Nery datan desde el 2001, cuando se sumergió de lleno en el mundo deportivo y se acercó a los medios de comunicación, especialmente a una radio que vio su potencial como corresponsal de ciclismo.

En 2008, Nery se trasladó al mundo del atletismo y un año después, regresó al ciclismo como comentarista de la Vuelta Ciclística a Guatemala. Su buen trabajo lo llevó a formar parte de un equipo patrocinador de ciclistas de este evento, con el que subió al podio de la Vuelta de 2014. 

Actualmente, Nery trabaja en la Federación Guatemalteca de Ciclismo, donde suma 8 años siendo uno de los periodistas más importantes de esta disciplina.

Más allá del banderazo de salida

Para Nery, la Vuelta es más que solo una competencia, es el “evento cumbre” que todos esperan sin importar cómo se disfruta, si es pedalista, aficionado, entrenador, mecánico o periodista.

“En enero, lo primero en lo que se piensa es la Vuelta Ciclística a Guatemala”

Desde su experiencia, no existe en el continente una afición como la que tiene Guatemala. En San Pedro, San Marcos y Xela se pueden ver kilómetros de aficionados que salen a ver el evento ciclístico.

Un evento que cambia vidas

Nery explica que la Vuelta Ciclística influye en el bienestar deportivo de los niños debido al impacto mediático que ha tomado en los últimos años. A muchos de los jóvenes los inspira ver a sus ciclistas favoritos en televisión y en redes sociales. Y esto les conduce a mejorar su salud, desempeño en el deporte y cómo se integran a la sociedad.

“Es importante comunicar los contextos de cada ciclista, los estilos de vida y las historias de vida para que la audiencia se vea reflejada en ellos”

Desde su posición como comunicador, Nery sabe que es una gran responsabilidad transmitir el bienestar deportivo a los jóvenes para motivarlos. Ahí es donde se vuelven relevantes las emociones que genera la Vuelta.

“Cada año y cada etapa tiene una emoción diferente. Se vive con alegría y nostalgia. Hace 10 años estaba mi papá conmigo y cada vuelta revive recuerdos familiares”

A través de una vida dedicada al ciclismo, Nery invita a practicar el deporte como una manera de vivir saludable y de enfocarse en disciplinas que construyen un mejor carácter para aumentar el bienestar del atleta, su familia y su comunidad.